Gerontologia - Universidad Maimónides

Mayo 15, 2005

SOLTEROS modelo 2005

solteros.jpgAlgunos son gerentes de compañias multinacionales
y estan demasiado ocupados siendo exitosos como para pensar en casarse. Otros empezaron tarde a gozar
de las virtudes de la libertad
y quieren hacerlas durar todo lo posible. En nuestro pais, la juventud y la solteria duran cada vez mas.

Revista Nueva
Domingo, 15/5/2005

En el mundo
En Austria, a principios de los años ’70 casi todos los jóvenes se casaban y las mujeres de hasta 50 años sólo quedaban solteras en un 8%; treinta años más tarde sólo el 50% de las mujeres contrae matrimonio.
Los últimos censos de varios países occidentales revelaron que existen cada vez más hogares unipersonales. En los Estados Unidos, hay 30.000.000 de personas que eligen vivir sin compañía, y los habitantes de Europa no se quedan atrás: el 55% de los irlandeses, el 50% de los finlandeses y de los suecos, el 46% de los franceses, el 45% de los daneses y el 42% de los españoles optan por este estilo de vida. La ciudad alemana de Hamburgo se considera la “capital de los solteros”, con casi un 50% de los hogares integrados por una persona.


Suele pensarse en ellos como un grupo homogéneo: gente que reúne ciertas características comunes. Y si bien esto es relativamente cierto en cuanto a la edad, se aleja de la realidad cuando se empieza a observar sus condiciones de vida. Los argentinos que tienen entre 21 y 34 años son más de 7 millones. Entre ellos hay profesionales de primer nivel, ejecutivos, estudiantes, cartoneros y adolescentes tardíos que no saben si irse o no de la casa de los viejos… La lista es tan vasta y amplia que se vuelve imposible.
Lo que sí es verdad y es nuevo, es que en este ‘grupo’ –si es que se puede llamarlo así– son cada vez más los que deciden irse a vivir solos y, una vez allí, se quedan, solteritos y sin apuro, tanto tiempo como sea posible, gozando de las bondades de la vida independiente (léase: libres de matrimonio, hijos, casa y crédito hipotecario, y todos los etcéteras que trae aparejada aquella vieja costumbre de consolidar una pareja y proyectar una familia en común). Cuenta Celina T.: “Tengo 32 años, me va bien en mi carrera –es publicitaria–, están a punto de ascenderme y es posible que me trasladen a la casa central de la empresa, en Miami… Estoy muy bien como estoy. Tengo mi departamento que me encanta, mis amigos, mis tiempos. A veces creo que también me gustaría casarme y formar una familia, tener hijos… Pero lo pienso por un rato y después se me pasa –ríe. Todavía me queda mucho por hacer. ¿Si después será tarde? Y bueno, entonces veré. Por ahora, disfruto de mi presente”.
La última Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC confirma el crecimiento de esta tendencia: en los principales centros urbanos del país (partidos del Gran Buenos Aires, Capital Federal, Córdoba, Mendoza, Tucumán, La Plata, Rosario y Mar del Plata) hay unas 300.000 personas, de entre 20 y 50 años, que viven solas.
Se estiró la soltería. Lo dicen todos. Sociólogos, psicólogos, analistas sociales, abogados… Y un estudio realizado por Cicmas Strategy Group (sobre una muestra de 399 casos entre personas de ambos sexos, de 14 a 30 años de edad, residentes en Capital Federal y GBA) demuestra que también “se ha extendido la juventud. De quienes tienen entre 26 y 30 años, sólo el 37% se considera adulto”. Los analistas de la firma sostienen que esto es “producto de la dificultad para alcanzar la independencia económica, de la mayor liberalidad sexual de los jóvenes (y de sus padres), y de un cierto desencanto con la imagen de familia tradicional”.
El psicólogo Norberto Inda está de acuerdo con estas observaciones: “Muchos quizás son hijos de padres divorciados, o ya pasaron por la situación de una separación, y piensan: ¿para qué repetir? En cuanto a lo económico, el buen pasar es inversamente proporcional a la construcción de una relación estable. Y además está el hecho, no menos importante, de que el proyecto de los hijos ya no ocupa el lugar que tenía antes. Incluso para las mujeres: ya no es ‘soy madre, entonces soy mujer’. Hay otras cosas que sirven para construir y afianzar la identidad: educación, poder económico, viajes, ropa, relaciones… En este grupo hay gente de un gran poder adquisitivo, que tiene gustos caros: es el segmento que más gasta, y las empresas lo aprovechan bien”. Claro. Hay todo un mercado que los mima. Son los nuevos niños ricos.

Consumidores vip
Guillermo Miller, director de Proyectos de Ipsos Media, señala que los jóvenes de entre 25 y 35 años que viven solos realizan más actividades placenteras: practican más deporte, van a más a cenar afuera, van a bailar y visitan los shoppings con más frecuencia; también hacen más salidas culturales. “En el último año, los jóvenes de esta franja que viven solos tuvieron vacaciones en mayor medida que los que viven con su familia o pareja. También son los que más viajan fuera del país”, agrega Miller.

“No sé… la verdad es que no está en mis planes casarme por ahora. Así estoy bien. No quiero más responsabilidadses”, Diego, odontólogo.


Y es que la cantidad de dinero que tienen para gastar es muy superior a la de las personas que viven en familia. Según revela el estudio realizado por Ipsos (sobre un universo de 10.807.055 personas de 13 a 64 años, en CF-GBA, Córdoba, Rosario, Mendoza, Tucumán y Mar del Plata, con entrevistas cara a cara entre enero y diciembre 2004.), el 43% de los que viven solos tiene una o varias tarjetas de compras o crédito y el 31% tiene su dinero depositado en una cuenta bancaria. Del mismo informe, surge que el 26% de los hombres y mujeres que habitan una vivienda unipersonal gasta más de la mitad de su sueldo en los shoppings, un 43% sale a cenar, un 23% va a bailar y más de un 20% consume productos de estética corporal o asiste a centros de belleza y spas de manera frecuente.
Son, por excelencia, los consumidores de alimentos importados gourmet y usan (mucho) el delivery; compran comida congelada; y son expertos en elegir restaurante.

La vida es bella
La socióloga Susana Finkel destaca que no todos gozan de tan buen pasar. “Están los que vienen de una familia de clase media alta, que han ido a estudiar afuera, hicieron masters, y alcanzan niveles gerenciales a muy temprana edad, en empresas de software y tecnología, por ejemplo. Este grupo es el que tiene mayor poder adquisitivo. Entre ellos hay muchos que, por su estilo de vida, no tienen pareja estable y se lo pasan viajando. Pero también están los que con gran esfuerzo se van del hogar paterno para construir su proyecto propio. Son creativos, emprendedores, suelen tener un trabajo pero no quieren depender de una sola empresa, así que también son cultores del tele-trabajo:


Por María Laura Ferro / Fotos: LAP TV y Nueva


Cifras
En Mendoza y Tucumán hay un 13% de personas que vive sin compañía, en Córdoba llega al 15,3% y en La Plata al 15,1%; en Mar del Plata, supera el 21%; y en el Gran Rosario, es de 16,4%. La soltería es un fenómeno mundial y en ascenso.

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Mayo 15, 2005 09:02 AM