Gerontologia - Universidad Maimónides

Junio 08, 2005

Pérdidas, stress y movimiento

Hay un juego de paciencia que consiste en tres tubos de metal de diferente diámetro que hay que encajar uno en otro y que están metidos en una caja cerrada por un cristal. Cómo lograrlo?

Resumen de la disertación realizada por la Lic Cristina Daverio el 21/4/05.
en la II Jornada de Prevención. El Adulto Mayor en Movimiento.
Publicado por Mayores en Movimiento
http://ar.groups.yahoo.com/group/mayoresenmovimiento/

Un camino posible es probar metódicamente siendo generalmente muy largo pero también podemo agitar al azar la caja hasta que se encajen las tres piezas. Es esto casualidad? No, detrás de este aprocedimiento existe un principio:
sólo el movimiento es capaz de conseguir lo que el cálculo no logra.
Sin ninguna duda la sensación de bienestar se traduce en movimiento pero si algo comienza a andar mal la
paralización o la hiperkinesia tienen su lugar.
Nuestro desarrollo vital nos presenta estímulos internos y externos que a lo largo de nuestra existencia nos lleva al trabajo continuo de encontrar su resolución. Las respuestas pueden ser variadas de un individuo a otro.
Relexionemos que pasa con el hecho de envejecer.
En una sociedad en que los valores de belleza, juventud y vigor aparecen como lugares de arribo y llegada, el
envejecer puede llegar a ser algo problemático.
Aceptar envejecer es poder adaptarse a los cambios biopsicosociales, cambios progresivos y no accidentales
consecutivos a la acción del tiempo.
No se envejece de un día para el otro. Se trata de un proceso pero de acuerdo con la personalidad de cada
ser para algunos la vejez los sorprende y la adaptación se dificulta. El replegarse sobre sí mismo,la apatía, la
tristeza, los trastornos del sueño y los desórdenes alimentarios como el hecho de apegarse a la rigidez e hiperactividad viviendo a un ritmo acelerado son manifestaciones patológicas de este proceso de adaptación.
Depresión y stress dos caras de una misma moneda, dos formas defensivas y opuestas que pueden cambiar de
dirección y salir del encierro que proponen al sujeto que las padece.
No nos dejamos de mover porque envejecemos sino que envejecemos porque nos dejamos de mover.Movimiento que
abarca un abanico de posiciones y abre posibilidades de calidad de vida.

Lic. Cristina Daverio
cdaveriosic@yahoo.com.ar

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Junio 8, 2005 08:39 AM