Gerontologia - Universidad Maimónides

Septiembre 14, 2005

Premian a un argentino que probó la eficacia de una técnica cardiológica

LIDERO UN ESTUDIO DISTINGUIDO EN UN CONGRESO DE LA SOCIEDAD EUROPEA DE CARDIOLOGIA REALIZADO EN SUECIA

Es la angioplastia con stent y drogas vía oral, usada para desobstruir arterias coronarias.

Oscar Angel Spinelli.
ospinelli@clarin.com
Miércoles | 14.09.2005

angioplastia_con_stent.jpg
Un estudio liderado por un cardiólogo argentino logró demostrar que un tratamiento de drogas por vía oral asociado a la angioplastia con stent puede disminuir, en ciertos pacientes, el riesgo de un nuevo bloqueo de las arterias coronarias en más de un 70 por ciento. El investigador principal del estudio es el doctor Alfredo Rodríguez, director del Centro de Estudios de Cardiología Intervencionista (CECI). La investigación recibió el Premio al Mejor Trabajo Libre de Cardiología Intervencionista en el Congreso Anual de la Sociedad Europea de Cardiología, que se llevó a cabo días atrás en Estocolmo, Suecia. El encuentro europeo convocó a más de 20.000 especialistas de todo el mundo, y el trabajo, realizado en la Argentina y monitoreado por varios centros de los Estados Unidos, superó diversas instancias de análisis hasta ser elegido como el más destacado en una de las ramas de la cardiología intervencionista. La angioplastia con stent es un tratamiento que se usa para desobstruir las arterias coronarias. Consiste en la introducción de un catéter que es llevado hasta la arteria del corazón "tapada". En el extremo del catéter se inserta un balón, que al llegar a la obstrucción se "infla" para dilatar la arteria. Luego, se coloca en la zona afectada una malla metálica especial que sirve para mantener la arteria abierta. Hay un procedimiento más avanzado que el anterior. Es el llamado "stent con droga". En este caso, a la malla se le incorporan medicamentos para contrarrestar la posibilidad de una nueva obstrucción. El método aplicado por el doctor Rodríguez es una variante de este último, ya que la droga —en este caso, rapamicina— se medica por vía oral. "Este tratamiento no reemplaza al del stent con droga —aclaró el doctor Rodríguez ante una consulta de Clarín—. Y aunque es un estudio reducido, demuestra que esta nueva estrategia puede ser una alternativa en aquellos pacientes con arterias de mediano tamaño —de más de 2,5 milímetros de diámetro— y en los no diabéticos; también, para aquellos que no pueden tomar drogas antiplaquetarias o que presenten obstrucciones coronarias de varias arterias". El trabajo científico premiado analizó la evolución, entre setiembre de 2003 y el mismo mes de 2004, de 100 pacientes con obstrucción coronaria y una edad promedio de 62 años. Los tratamientos se realizaron con pacientes del Sanatorio Las Lomas, en San Isidro, y del Sanatorio Otamendi, de Capital. A los 100 pacientes con angioplastia (se realizaron sobre ellos 132 procedimientos) se los dividió en dos grupos. Uno recibió 6 miligramos de rapamicina por vía oral dos horas antes de la angioplastia, seguido de 3 mg/día durante 14 días. Otro grupo continuó con el tratamiento médico convencional. De acuerdo con el estudio, al año de seguimiento solamente el 12 por ciento de los pacientes del primer grupo registró un nuevo bloqueo de las arterias, mientras que en el segundo grupo el índice de restenosis alcanzó al 42 por ciento. Otro dato importante fue que la necesidad de nuevos procedimientos de revascularización del vaso tratado fue del 8,3 por ciento en el primer grupo versus el 37,2 por ciento, en el segundo. Además de que el tratamiento combinado previene las nuevas intervenciones porque habría menos posibilidades de que las arterias vuelvan a bloquearse, se destaca que la rapamicina, "utilizada durante un corto tiempo —según aclaró el doctor Rodríguez—, en el estudio demostró no producir efectos colaterales importantes". Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Septiembre 14, 2005 08:14 PM