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Octubre 07, 2004
El sexo en la vejez, según García Márquez

Garcia_Marquez.JPGLa nueva novela del Nobel colombiano

Hacía una década que "Gabo" no publicaba un libro de ficción; hoy se conocerá la tapa, en Francfort

La obra se titula "Memorias de mis putas tristes" El protagonista es un hombre de 90 años que recuerda a las mujeres de su vida mientras hace el amor por última vez con una joven

La Nación Cultura
Jueves 7 de Octubre de 2004

La Feria del Libro de Francfort, inaugurada ayer, tendrá la primicia. No podía ser de otro modo tratándose de la principal muestra editorial del mundo. La tapa de la nueva novela corta de Gabriel García Márquez, que saldrá a la venta simultáneamente en todo el mercado hispanohablante, se conocerá hoy en esa ciudad alemana. Y la expectativa es enorme.

El célebre "Gabo" García Márquez vuelve a publicar una novela después de diez años de no hacerlo. Durante esa década publicó, en 2002, el primer tomo de sus memorias, "Vivir para contarla"; en 2000, "Por la libre", un compendio de artículos periodísticos; en 1996, "Noticias de un secuestro", una obra del género de no ficción, y en 1994, el libro de cuentos "Del amor y otros demonios".
"Memorias de mis putas tristes" está editada para los países del Pacto Andino por el sello colombiano Norma; para México, por Editorial Diana, y para el resto de América latina y España, por Random House-Mondadori, al que pertenece Sudamericana, de la Argentina. Tendrá una tirada inicial de un millón de ejemplares.

Según publicó ayer el diario colombiano El Tiempo, pese al hermetismo que rodea a la novela, el mismísimo García Márquez le habría revelado al director de noticias de RCN Radio, Juan Gossaín, el argumento.

Es la historia de un hombre que llega a los 90 años y hace el amor por última vez con una jovencita mientras recuerda su propia vida y a las mujeres con las que tropezó.

Según el escritor y periodista Heriberto Fiorillo -que escribió un ensayo sobre la nueva novela de García Márquez-, el narrador rinde homenaje al escritor japonés Yasumari Kawabata, premio Nobel de Literatura 1968, por quien ha expresado reiteradamente su admiración.

En especial por su cuento "La casa de las bellas durmientes", lo que según los críticos materializó el escritor colombiano en su cuento "El avión de la bella durmiente", incluido en "Doce cuentos peregrinos".

La fecha exacta de salida de la novela se anunciará esta tarde en Francfort, pero se estima que no será antes del 25 de este mes. Casi de inmediato será traducida al italiano y al francés y saldrá en inglés dentro de un año.

El amor para "Gabo"

El reconocido editor colombiano y viejo amigo de García Márquez Moisés Melo dijo ayer a la agencia de noticias AP que "después de diez años García Márquez ha escrito una obra de ficción sobre el amor de un hombre en la madurez de su vida, en un tono melancólico muy bonito".

El amor ha sido, según Melo, "un tema muy fuerte en toda su obra, especialmente a partir de «El amor en los tiempos de cólera»".

El narrador colombiano, que ha superado una dura batalla contra el cáncer, escribió su historia en apenas 115 páginas.

Para su ensayo, Fiorillo entrevistó a varias de las prostitutas del burdel El Molino Rojo, de Barranquilla (alusión probable al Moulin Rouge, de París), local al que García Márquez solía acudir en su juventud para escuchar historias.

Ayer, en México, país de residencia de García Márquez, se especulaba con que esta novela corta anticipa el segundo tomo de las memorias del narrador, aún sin fecha de edición.

Susana Reinoso

Después de diez años
Gran expectativa
* "Memorias de mis putas tristes" genera una enorme expectativa, no sólo por ser una novela de Gabriel García Márquez, sino porque hace diez años que el colombiano no abordaba este género.

Lanzamiento
* Hoy se conocerá la tapa del libro en la Feria de Francfort, aunque el lanzamiento se prevé para fin de mes.


http://www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=642748


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Gabo y la eternidad del sexo

A Gabriel García Márquez, hasta hoy, había que adjudicarle la invención de Macondo, la revelación de la eternidad a través de la eterna familia Buendía, la fascinación de un patriarca demoníaco, la anunciada crónica de la belleza de la muerte, su fidelidad ideológica, alguna boutade escandalosa como la declaración de la guerra ortográfica, y la consagración de una Colombia mítica, distinta a la desafortunada y sombría de las malas noticias.

Desde ahora habrá que adjudicarle también la legitimación de una palabra de etimología remota e incierta, largamente prohibida, casi siempre evitada en las aulas y en las casas correctas y tratada elíptica o eufemísticamente en los medios masivos.

Palabra generalmente liberada en el insulto, en el teatro banal de letras ramplonas, en el interior de textos brutales o en la intimidad de una cama sin represiones pueriles. Además, y esto es lo fantástico, habrá que atribuirle a García Márquez, desde ahora, la inauguración de una historia increíble: la de un hombre de noventa años que decide hacer el amor por última vez y en el trascurso del acto va recordando a todas las mujeres que han pasado por su vida. Este mero hecho de longevidad sexual, aparte del excepcional acontecimiento de la supervivencia, reafirma la ya larga fama de fabulador del escritor contemporáneo más mentiroso y verdadero.

El título de su nueva novela, Memoria de mis putas tristes, va a lograr -ya lo está haciendo- que esa legendaria distinción laboral femenina sea considerada un homenaje y una reivindicación a tanta difamación inmerecida. Y que la antigua palabra de cuatro letras, casi siempre manipulada a través de puntos suspensivos, sea finalmente incluida -con su autorización- entre las palabras naturales no censuradas por las buenas costumbres.

El lenguaje suele imponer aparentes sinónimos que nunca quieren decir lo mismo que la palabra que duplican. Por eso según las épocas, las culturas y el rango social del hablante, ha ido eligiendo simulaciones más o menos familiares a la palabra de origen que tal vez pudo haber sido italiana y quiere decir muchacho, en masculino.

Ramera, buscona, cortesana, meretriz, prostituta, hetaira, y últimamente gato, son algunos de esos nombres alternativos que los varones le han ido poniendo a la protagonista del ejercicio del amor rentado, o excepcionalmente gratuito en aquellas de actitud filantrópica.

Pero lo que más golpea y fascina del argumento de la novela de García Márquez es esa ilusión del amor llevada a ese umbral imposible: el de un varón casi centenario determinado a cumplir con la felicidad de su última cópula. La palabra "imposible" es una sensación. Aunque sé que muchos argentinos, de autoestima narcisística, podrían augurar para sí mismos el destino sexual del interminable viejo de la novela. Eso, si la vida los empuja hasta los noventa vivos, y todavía móviles. Y aún con el suficiente ánimo para capturar el hilo final de su libido sin que la menoscabe la dieta de caldito desgrasado y los catorce comprimidos para tratar de demorar el inevitable viaje.

Que a un escritor le haya sido dado el alto don de la fábula es natural. Pero no lo es que a un hombre le haya sido dado el alto don del sexo a la edad en que casi todos los de su generación ya han muerto. Y que aun antes de morirse ya lo consideraban una vaga e inasible nostalgia. Más exótica y de otro mundo sería si la última cópula de la vida tuviera como protagonista a una tierna viejecita de nueve décadas. Este cuento es aún más increíble que el otro.

García Márquez se inventó la más bella fantasía que se le pueda ocurrir a un varón que hace mucho pasó por la juventud. Y que además sabe y siente que, cuando ésta se apaga, hay muchas cosas que ya no se encienden.

http://www.lanacion.com.ar/edicionimpresa/suplementos/enfoques/nota.asp?nota_id=643577

Enviado por Licenciatura en Gerontología el: Octubre 7, 2004 08:53 AM