«Necesitamos una iniciativa global sobre las cuestiones éticas y de la privacidad que plantean las tecnologías de la información y las comunicaciones [TIC]», declaró el profesor Emilio Mordini a CORDIS Noticias. Pero antes de embarcarse en esta tarea tan colosal, el profesor está dirigiendo una iniciativa más pequeña, aunque igual de ambiciosa, que investiga las cuestiones sociales, éticas y de la privacidad derivadas de las soluciones de TIC destinadas a la creciente población anciana. Se trata del proyecto SENIOR, financiado con fondos comunitarios, que arrancó oficialmente el 4 de marzo de 2008.
Las denominadas tecnologías asistenciales tienen por objetivo mejorar las actividades cotidianas de las personas mayores, así como de las personas que sufren discapacidades, con el fin de suplir su pérdida de independencia. Sin embargo, aunque estas tecnologías son muy prometedoras, también plantean el riesgo de aislar aún más a estos grupos de población.
«La tecnología puede mitigar la carga de la dependencia, ya que permite a muchas personas vivir con autonomía en sus hogares o en un entorno asistido», explicó el profesor Mordini a CORDIS Noticias. «No obstante, la tecnología también puede poner en grave peligro la autonomía y la dignidad de las personas», añadió.
Por estas razones, el proyecto tendrá como propósito proporcionar una evaluación sistemática de las cuestiones sociales, éticas y de la privacidad implicadas en las TIC y el envejecimiento. Por medio de una serie de encuentros temáticos entre especialistas, los ocho socios de los sectores privado y académico analizarán por primera vez las tendencias tecnológicas actuales para poder entender qué lecciones deberían aprenderse y elaborar futuras estrategias para regir las tendencias tecnológicas del mañana.
La tecnología de seguimiento es uno de los temas que el consorcio del proyecto someterá a una evaluación rigurosa. «La tecnología de la información moderna ha incrementado las posibilidades para el seguimiento. Algunos ejemplos de tecnologías de supervisión destacadas en el campo de los servicios de asistencia son los sensores en las puertas de salida que avisan de movimientos indeseados o una especie de etiqueta electrónica que hace posible la localización de los ancianos», explicó el profesor Mordini. «Estas aplicaciones plantean cuestiones éticas serias. ¿Qué marcos éticos y de la intimidad deberían construirse para proteger a los ciudadanos de la tercera edad, algunas veces incapaces de dar su consentimiento, del abuso de los investigadores? ¿Cómo puede uno garantizar el control de los usuarios sobre estos sistemas?», planteó.
Además de evaluar los riesgos asociados a las TIC, con el proyecto también se pretende identificar los servicios y las soluciones de TIC más pertinentes para el objetivo de evitar la exclusión social y promover la inclusión de las personas mayores. Por último, se planeará el modo de incorporar los principios éticos y de la intimidad al diseño de estas nuevas tecnologías desde el principio.
El principal resultado del proyecto será un plan de acción que sus autores esperan que impulse el desarrollo y el despliegue futuros de las TIC para la tercera edad, y que reflejará los principios éticos de privacidad definidos en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
Para obtener más información, consulte:
http://www.seniorproject.eu/public/
http://cordis.europa.eu/fetch?CALLER=ES_NEWS_FP7&ACTION=D&DOC=1&CAT=NEWS&QUERY=1204901965223&RCN=29203