La población de América latina envejece más rápido de lo previsto y se espera que en 40 años las personas mayores de 60 años representen casi un cuarto del total de habitantes de la región, según un informe presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) que se dio a conocer ayer durante el Trigésimo Segundo Período de sesiones de ese organismo, que se celebra en Santo Domingo, República Dominicana.
La Nación
Viernes 13 de junio de 2008
El documento muestra que entre 1950 y 2000 la población mayor de 60 años aumentó del 5,5 al 8,8 por ciento. Pero esta tendencia ascendente se agudizará en el medio siglo próximo: para 2050, los que estén encima de los 60 años serán el 23,6% del total de habitantes. Es decir, numéricamente, en sólo un siglo, esta franja etaria pasará de 9 millones a 180 millones de habitantes. Contrariamente, el número de jóvenes se reducirá el 17% de 2005 a 2050.
Varios de estos datos ya se habían dado a conocer hace un año en el Foro Económico y Social de las Naciones Unidas.
Causas
La disminución en la tasa de natalidad, sumada a la mayor esperanza de vida en la población, son las principales causas que explican el fenómeno del envejecimiento en la región. En la Argentina, la tasa de fecundidad tiene una evolución descendente desde la primera década de 1900, cuando era de 7 hijos por mujer. Hoy es de 2,3 -apenas por debajo de la de la región, que es de 2,4- y dentro de 20 años llegará a 2. En 50 años, la tasa disminuirá a 1,8, según las proyecciones de la Cepal. El dato es preocupante si se considera que el recambio generacional se asegura con 2,1 niños por madre.
Según Sandra Huenchuan, directora del área de Población y Desarrollo de la Cepal, "los cambios demográficos no han sido independientes de los cambios económicos y sociales experimentados. Se amplió la cobertura de salud y se mejoró el estado nutricional de la población, así como se difundieron los nuevos descubrimientos de la medicina. Esto no sólo contribuyó a prolongar la vida y mejorar la salud, sino que también provocó cambios en las creencias y en los comportamientos relacionados, por ejemplo, con el número deseado de hijos".
Debido a esta disminución en la tasa de natalidad, la Argentina dejará de crecer demográficamente en 2050. Pero, a pesar de esta acentuada baja el país no ocupa los primeros lugares en el ranking de envejecimiento. El primer puesto lo tiene Cuba, donde en 2100, habrá cuatro adultos mayores por niño.
Le sigue de cerca Uruguay, donde en 2018 se calcula que habrá igual cantidad de niños que de mayores de 60 años. Chile y la Argentina se encuentran lejos de esta realidad, pero no les alcanza para ser los más "jóvenes", título que ostentan Guatemala, Haití y Bolivia.
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