La gerontología ofrece a los adultos mayores una mejor calidad de vida. Profesionales de diferentes especialidades asisten a esta población, cada día en crecimiento.
La gerontología es la ciencia que estudia el envejecimiento. Aunque dentro de sus especializaciones se puede hablar de gerontología biológica, clínica y psicogerontología, es la gerontología social una de las más conocidas y necesitadas en nuestro contexto.
Vanguardia
Bucaramanga, Colombia - Viernes, 12 de diciembre de 2008
Esta área trata del estudio de los cambios que presentan los adultos mayores en sus roles sociales.
Laritza Alarcón Almeyda, gerente de una casa campestre geriátrica, explica que como resultado de un estilo de vida saludable, los avances de la medicina y el incremento de mejores condiciones de vida, las expectativas de vida promedio tanto en el hombre como en la mujer han aumentado.
“Si hoy nuestros padres o abuelos mantienen un estilo de vida independiente, no necesariamente eso es garantía de conservar su buen estado de salud y posiblemente nos corresponda la responsabilidad de planear su futuro. Por lo general a nadie le gusta pensar en la posibilidad de hacernos mayores, por lo cual este no es un tema amable de sopesar, pero planificarlo sí nos permitirá enaltecer, expresar amor, agradecimiento y apoyo a quienes han sido el origen de nuestro entorno familiar”, dice Laritza Alarcón Almeyda.
Soledad, aislamiento e inactividad
El mayor nivel de ocupación de los integrantes de la familia, acentúa cada día el aislamiento de los adultos mayores y, por ende, su soledad, con consecuencias en su salud emocional. Si a esto se suma la creciente inactividad física a la que está expuesto el adulto mayor, se produce el acelerado deterioro de su salud.
Laritza explica que uno de los motivos más comunes para que un adulto mayor se aísle de su entorno es la pérdida de vínculos familiares estrechos. En esos casos se hace necesaria una intervención gerontológica de tipo psicológico, que ayuda a atenuar el dolor.
Por eso, de manera preventiva resulta indicado plantear en familia cómo atender el entorno de quien generacionalmente requiere mayor atención, sin dar espera a situaciones que atendidas tardíamente se conviertan en prolongadas situaciones de crisis.
Buscando mejorar la calidad de vida del adulto mayor es común encontrar soluciones como la ayuda en casa por parte de una enfermera que le acompaña y le asiste en el manejo de la medicación respectiva y en otras necesidades varias.
Otras, como hogares geriátricos, son alternativas integrales con el objeto de cuidar, asistir y acompañar al adulto, incluyendo entre sus servicios la estancia o residencia permanente del mismo.
Pero el creciente interés por el bienestar de la familia y por el comportamiento del adulto mayor ha permitido el desarrollo de programas institucionales especializados en la atención de esta población, apoyados en un equipo interdisciplinario de profesionales de la salud.
Los más recomendados son aquellos con espacios abiertos tipo campestre, buscando que estos centros se conviertan en una real solución a situaciones como las mencionadas.
La asistencia ideal para el adulto mayor es la que se brinda en un lugar de paso donde se proporcione un programa de vida diseñado como opción de vida, con espacios físicos cálidos para sus huéspedes y servicios profesionales encaminados a promover la prevención y la protección, en una apuesta clara por mejorar su calidad de vida.
Gerontología
La gerontología, al estudiar el comportamiento social, busca proyectar en los adultos mayores el desarrollo de sus actividades.
Laritza Alarcón Almeyda explica que la pérdida de habilidades en el adulto mayor puede manejarse mediante terapia ocupacional para aprender nuevas habilidades o para lograr una mayor seguridad emocional y para ayudar a las personas a estar activas física y mentalmente.
Algunos de los profesionales que desarrollan la gerontología son los terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, fisioterapeutas, psicólogos, enfermeras, ortopedistas y médico tratante, entre otros.
Modalidades de un buen centro
- Huésped residente: Es la calidad que posee el huésped que tiene por residencia permanente el centro.
- Huésped temporal: Es la residencia temporal que se ajusta a aquellos huéspedes que requieren pasar una temporada corta, bien sea por vacaciones o como terapia de relajación.
- Huésped invitado: Es la calidad de invitado que se da al adulto que asiste al centro diariamente, participando en forma activa de todas las actividades programadas y regresando en la tarde a su casa.
La adecuada nutrición es también una prioridad en los centros de asistencia al adulto mayor. Averigüe por un lugar donde las minutas se diseñen teniendo en cuenta los gustos individuales y necesidades físicas.
http://www.vanguardia.com/vivirmejor/informe-salud/15053-gerontologia-el-consentimiento-de-los-anos