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Las combinaciones de medicamentos están poniendo a los adultos mayores en riesgo

Según los investigadores, mezclar medicamentos de venta libre con los de venta con receta es peligroso

Por Steven Reinberg
Reportero de Healthday

Un estudio reciente halla que hasta el cuatro por ciento de los adultos mayores de los EE. UU. combinan medicamentos de venta libre con recetados de maneras que los ponen en riesgo de interacciones potencialmente peligrosas.

Un informe reciente calculó que los adultos mayores de 65 corresponden a más de las 175,000 visitas al departamento de emergencia por reacciones adversas a los medicamentos cada año. Los medicamentos recetados comúnmente correspondieron al 33 por ciento de estas reacciones farmacológicas.

"La enorme mayoría de los adultos mayores están usando al menos un medicamento y más adultos están usando más medicamentos, sobre todo los recetados, en comparación con hace una década", señaló Dima M. Qato, autor de la encuesta, de la Universidad de Chicago.

Además, cerca del treinta por ciento de los adultos mayores están tomando al menos cinco medicamentos recetados y muchos combinan medicamentos de venta libre con los recetados. Entre los medicamentos usados comúnmente, las interacciones entre medicamentos van más allá de los medicamentos recetados, ya que cerca de la mitad tiene que ver con medicamentos de venta sin receta o complementos dietéticos.

"Y a pesar de la disponibilidad limitada de la información sobre la seguridad de medicamentos, sobre todo los complementos dietéticos, con frecuencia se usan en adultos mayores", agregó Qato.

Los pacientes necesitan saber que aunque los medicamentos con frecuencia son beneficiosos, con frecuencia existen riesgos relacionados con su uso, señaló Qato.

"Si necesitan automedicarse con medicamentos de venta libre o complementos dietéticos, deberían consultar a su médico o farmaceuta. Esto resulta particularmente importante entre los adultos mayores porque, a medida que la gente envejece, es más vulnerable a los efectos negativos de los medicamentos, incluidas las interacciones", advirtió Qato.

El informe aparece publicado en la edición del 24 al 31 de diciembre de la Journal of the American Medical Assoc7iation.

En su estudio, el equipo de Qato usó información de encuestas recolectada sobre más de 3,000 adultos entre los 57 y los 85 años de edad. Los investigadores examinaron todos los medicamentos, tanto los de venta libre como los recetados, utilizados entre junio de 2005 y marzo de 2006.

Los investigadores hallaron que el 91 por ciento de los adultos estadounidenses, cerca de 50.5 millones, usaron al menos un medicamento regularmente. Los medicamentos recetados eran usados por el 81 por ciento de los adultos, es decir, 44.9 millones de estadounidenses de mayor edad. La mayoría de los medicamentos fueron usados por los que tenían entre 75 y 85 años de edad.

Además, cerca del cincuenta por ciento de los adultos mayores usaron al menos un medicamento de venta libre o complemento dietético. Más mujeres que hombres usaron medicamentos recetados y complementos dietéticos. Sin embargo, los investigadores hallaron que el uso de medicamentos de venta libre fue igual para hombres y mujeres.

Más del cincuenta por ciento de los encuestados usó al menos cinco medicamentos recetados, de venta libre o complementos dietéticos. Entre los que tomaron medicamentos recetados, el 29 por ciento usó más de cinco medicamentos y el uso aumentó con la edad tanto entre hombres como entre mujeres, informa el grupo de Qato.

Además, los investigadores hallaron que el 68 por ciento de los adultos mayores usaron medicamentos recetados más medicamentos de venta libre o complementos dietéticos. Entre los que combinaron medicamentos, el cuatro por ciento estaba en peligro de reacciones adversas a los medicamentos.

Además, el índice de interacciones adversas a los medicamentos aumentó con la edad, sobre todo entre las mujeres. Los investigadores hallaron que más del cincuenta por ciento de estas interacciones involucraron el uso de medicamentos de venta libre.

El grupo de Qato halló que las interacciones adversas más comunes tuvieron lugar con anticoagulantes como warfarina y medicamentos antiplaquetarios como aspirina.

"Los médicos y farmaceutas necesitan preguntar a los pacientes de mayor edad sobre los medicamentos que utilizan, recetados o no, y los pacientes necesitan estar preparados para compartir esta información", aseguró Qato. "Esto resulta especialmente importante en los pacientes que acuden a varios proveedores y los que se hacen surtir su recetas en varias farmacias".

La Dra. Laurie Jacobs, jefa de medicina geriátrica del Centro médico Montefiore de la ciudad de Nueva York, considera que el potencial de reacciones adversas a los medicamentos por mezclar medicamentos es fantástico y que los pacientes necesitan coordinar el uso de medicamentos con un médico para protegerse de las interacciones perjudiciales.

"Nadie está vigilando la cantidad de medicamentos que toman para buscar interacciones potenciales", aseguró Jacobs. "Otra persona que no sea el paciente debe revisar la lista completa".

Jacobs anotó que el aumento en la cantidad de personas que toman medicamentos es algo bueno. "Ha habido una intensificación de las terapias para las enfermedades", apuntó.

Sin embargo, también ha habido un aumento en la cantidad de medicamentos y más esfuerzos por comercializarlos, lo que hace que la gente busque médicos que se los receten, aseguró Jacobs. Además, también ha habido un aumento en el uso de complementos, anotó.

"Con frecuencia, los pacientes tienen dificultades para evaluar lo apropiado de los complementos teniendo en cuenta sus problemas médicos", aseguro Jacobs. "No están buscando el consejo de su médico sobre el uso de complementos", dijo.

Entre las reacciones adversas a los medicamentos se encuentran:

Lisinopril (Prinivil) más potasio pueden elevar los niveles de potasio en la sangre y alterar el ritmo cardiaco.
Warfarina (Coumadin) más simvastatina (Zocor) pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Warfarina (Coumadin) más aspirina pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Atorvastatina (Lipitor) más niacina pueden causar debilidad y descomposición muscular.
Simvastatina (Zocor) más niacina pueden causar debilidad y descomposición muscular.
Ginko más aspirina pueden aumentar el riesgo de sangrado.

http://healthfinder.gov/

(FUENTES: Dima M. Qato, Pharm.D., M.P.H., University of Chicago; Laurie Jacobs, M.D., chief, geriatric medicine, Montefiore Medical Center, New York City; Dec. 24/31, 2008, Journal of the American Medical Association)

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