Un informe médico presentado en una conferencia de prensa en esta ciudad, con motivo de desarrollarse el "Mes del Corazón", precisó que el colesterol elevado causa el 18% de la enfermedad cerebrovascular y el 59% de las patologías coronarias.

Ricardo Iglesias, médico cardiólogo presidente de la SAC, sostuvo que "a pesar de esos datos, la buena noticia es que muchas de esas afecciones se pueden prevenir, ya que en su gran mayoría son producidas por un estilo de vida poco saludable".

Iglesias señaló que "el tabaquismo, la inactividad física y los malos hábitos alimentarios son factores de riesgo cardíaco, pero adoptando sencillas medidas de prevención es posible reducirlo y sobre todo bajando los niveles de colesterol malo".

El colesterol es una sustancia grasa indispensable para formar membranas celulares y producir ciertas hormonas que es segregado por el hígado y también se incorpora a través de la alimentación, en especial carne, huevos y productos lácteos enteros.

El organismo forma las lipoproteínas de colesterol LDL o malo y el HDL o bueno, dependiendo de las proteínas a las que esté unido.

Iglesias explicó que "cuando los niveles superan los máximos recomendados, los lípidos se acumulan en los vasos sanguíneos, lo que favorece el endurecimiento de las arterias o aterosclerosis".

El especialista señaló que "ese cuadro clínico aumenta el riesgo de trombosis y triplica el riesgo de infarto".

La Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación indicó que, en Argentina, el 28% de la población mayor de 20 años que alguna vez se midió el colesterol refirió tener niveles elevados de este lípido y en el grupo entre 50 y 64 años, la tasa aumentó al 37,3%.

Iglesias reconoció que "lamentablemente, en los últimos años los niveles de colesterol están creciendo en la población, tanto por el aumento de grasa saturada en los alimentos como por el sedentarismo".

El especialista isistió en que "todo esto es debido a cambios en el estilo de vida: se utiliza el automóvil para hacer las compras en el supermercado de la otra cuadra, los entretenimientos se encuentran en los shoppings y comer y fumar reemplazaron a la vida al aire libre y los deportes".

"Un ejemplo de alimentación saludable es la utilización, entre otros ingredientes, de fitoesteroles en la dieta diaria -detalló-, que son compuestos naturales vegetales muy similares al colesterol humano y tienen la capacidad de bloquear parcialmente la absorción del colesterol a nivel intestinal".

Esos componentes, explicó, "se encuentran presentes en nuestra alimentación, aunque en escasas proporciones, en productos como el aceite de girasol y la soja; además existen dentro de alimentos funcionales como productos lácteos enriquecidos en fitoesteroles, en los que la concentración es mucho mayor".

Los médicos aconsejan también reducir el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas y frituras, carnes rojas grasas, embutidos, confituras y chocolate y aumentar el consumo de fibras como cereales y legumbres, pescado de mar, frutas y verduras.

El otro eje de la prevención es la actividad física y en ese sentido, Iglesias opinó que "el sedentarismo debe combatirse naturalmente, desde todos los flancos: hay que caminar siempre que sea posible, bajarse unas cuadras antes de llegar a destino y preferir las escaleras al ascensor".

Los niveles de colesterol superiores a 200 mg/dl, sumando el bueno y el malo, aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y es cuando se aconseja iniciar un tratamiento para controlar la enfermedad.

http://www.telam.com.ar/vernota.php?tipo=N&idPub=162361&id=316173&dis=1&sec=1