Sólo el 5 por ciento de los estadounidenses mayores de 65 años viven en alojamientos grupales tipo geriatricos u hogares de ancianos. En los últimos años, esta proporción ha ido disminuyendo constantemente (basado en datos de 2008 del American Community Survey).
11 DE SEPTIEMBRE DE 2010
(distribuido por mayores en movimiento)
La gran mayoría de las personas mayores quieren envejecer en sus propios hogares. Nueve de cada 10 adultos mayores se quedan donde están, cuando se jubilan, según la AARP.
Mientras muchos ancianos se encuentran en mejor estado de salud que en las generaciones anteriores, afrontan el desafío de seguir viviendo de forma independiente. También viven más tiempo que nunca. Este será un reto social: El número de personas de entre 65 y más años pasará del 13 por ciento de la población actual en EE.UU. al 20 por ciento para 2050, según el Censo Nacional
La alternativa que se ha encontrado es la promoción de construcciones con características tales que las hagan aptas para la vida en todas sus etapas y bajo cualquier condición física. Se las denomina: VIVIENDA UNIVERSAL.
Los constructores incorporan conceptos de diseño universal para crear hogares sin barreras, evitando costosas modificaciones posteriores. Aquí, una visita guiada por una casa diseñada para ser accesible a todos.
El buzón es lo suficientemente bajo para recoger el correo desde una silla de ruedas. No hay peldaños frente a las entradas y las puertas son suficientemente amplias para permitir el paso tanto de un cochecito de bebe, como una silla de ruedas.
Todos los tiradores de las puertas son de palanca (picaportes) porque una gran proporción de las personas mayores pierden un poco de destreza en sus muñecas por artrosis, lo que les hace más difíciles manejarse con las perillas tradicionales.
En la cocina, hay espacio libre debajo de la mesada y pileta de cocina. Eso es para permitir que alguien pueda lavar los platos mientras está sentado, ya sea en una silla de ruedas o en un taburete, para su descanso.
Y las alacenas estan muy bajas, para que puedan ser alcanzadas por alguien en una silla, de baja estatura, o con problemas de artrosis en sus hombros.
La VIVIENDA UNIVERSAL es muy similar a cualquier otra vivienda normal. No tiene apariencia ni costos significativamente distintos, si se planea desde su inicio.
El que imagine encontrar algo especial, que lo identifique como “una casa para minusválidos” seguramente quedara decepcionado, porque solo se encontrará con una vivienda normal con muchas características diseñadas para la accesibilidad que se encuentran comúnmente en los buenos proyectos.
Por ejemplo: en la mesada de cocina los estantes pueden salir como cajones (igual que las bandejas de un horno) y una canilla para agua se instala sobre las hornallas de la cocina para evitar el tener que llevar una olla pesada con agua desde el fregadero.
Los expertos en envejecimiento dicen que estos diseños son esenciales para absorber los cambios naturales que sobrevienen con la edad, y ayudarlos a prevenir accidentes. Sería ideal que desde la madurez se planificara con anticipación en el momento de comprar una casa, exigiendo diseño universal desde el principio.
Pero aquí está el problema: Nadie piensa que necesitará dichos alojamientos.
En el momento de hacer encuestas, cuando a los adultos se les pregunta sobre el momento de su ancianidad, y no importa en qué década de su vida se encuentran, ellos creen que la vejez llegara al menos una década mas tarde. (Y si usted está aún en sus 80 años supone que el envejecimiento lo espera para sus 90’.)
El Diseño Universal procura un mercado mas amplio
Así que los defensores y constructores de estos proyectos están tratando de ampliar el concepto de utilidad de estos edificios. ¿Entradas planas y puertas anchas? Son excelentes para las madres con los cochecitos. ¿Manillas en las puertas? Son muy convenientes también si se llega con los brazos cargados por las compras de comestibles.
Algunas comunidades de Estados Unidos de América no aceptan que sea el mercado quien decida. En los últimos años, decenas de estados y localidades han aprobado leyes que fomenten los aspectos del diseño universal. En parte, esto se debe a la gran cantidad de dinero que está en juego. Medicaid y Medicare pagan por una gran cantidad de los costes de enfermería en casa. Si se reduce la cantidad de personas que deben ser trasladados a los hogares de ancianos, se economizan muchos fondos públicos en estos estados y ciudades.
A veces usan el palo, y a veces la zanahoria. Un ejemplo de zanahoria es informar a los constructores que tendrán una reducción en el proceso de permisos si diseñan su casa para tener estas características.
Para muchos que pueden optar por salir de un hogar de ancianos y residir en su propia casa, simplemente significa la libertad.
Se les da "la capacidad de hacer lo que quiero, cuando quiero y como quiero - y no tener a alguien para decirme que no puedo hacer eso, o no puede hacer esto", dicen.
Es un privilegio que millones de ancianos no quieren perder solo porque sean viejos.
http://viviendaterceraedad.blogspot.com/2010/09/envejecer-en-su-casa.html