Gerontologia - Universidad Maimónides

Marzo 11, 2005

ESTRES Y ENVEJECIMIENTO

Un grupo de científicos realizó un estudio que podría explicar, a nivel celular, por qué las personas que viven bajo altos niveles de estrés sufren un acelerado proceso de envejecimiento.

Por: COMO VES
Fecha publicación:11/3/2005

Elissa S. Epel, de la Universidad de California en San Francisco, y sus colegas, estudiaron a mujeres sanas y premenopáusicas, a las que dividieron en dos grupos: el primero de 39 madres de niños con enfermedades crónicas (a las que llamaron 'cuidadoras') y el segundo de mujeres con hijos sanos (al que llamaron 'control'). A ambos grupos les dieron un cuestionario para saber qué tan estresadas se sentían y el resultado, obvio, fue que las cuidadoras expresaban vivir con niveles de estrés mucho mayores que las del grupo control.

Después, los científicos tomaron muestras de sangre de las mujeres de ambos grupos y extrajeron los leucocitos, a los que realizaron varias pruebas. Se dieron cuenta que los telómeros de los cromosomas que pertenecían a las cuidadoras eran más pequeños y que sus células tenían menores niveles de la enzima telomerasa que los de las mujeres del grupo control.

Un telómero es una especie de tapa, que se localiza en la parte final de un cromosoma. Su función es evitar que los cromosomas pierdan material genético en sus extremos, pero cada vez que una célula se divide, se reduce la longitud del telómero y cuando, después de muchas divisiones celulares, el telómero es ya muy pequeño, el cromosoma pierde la capacidad de duplicarse. Esto significa que la célula ha envejecido. El resultado de células envejecidas es un cuerpo envejecido, y por ello los telómeros cortos están asociados con una edad biológica avanzada.

La telomerasa es una enzima que tiene la capacidad de alargar los telómeros, y si es activada en una célula, podrá seguir dividiéndose y se retrasarán su envejecimiento y muerte. Los niveles de telomerasa naturalmente decrecen con la edad y como consecuencia las células envejecen y van perdiendo la capacidad de resistir a las enfermedades.

Lo que encontraron los investigadores es que el estrés crónico acelera el proceso de envejecimiento: entre más largo fue el lapso que las madres llevaban cuidando a sus hijos enfermos, más cortos eran sus telómeros y más bajos sus niveles de telomerasa. En mujeres que habían sufrido un gran estrés por largos periodos de tiempo, los telómeros eran equivalentes a los de personas 10 años mayores que ellas.

Estos resultados son un foco rojo en relación a la importancia de aprender a manejar correctamente los altos niveles de estrés y además representan un paso sin precedentes para descifrar la conexión biológica que existe entre el cuerpo y la mente.

http://www.argenpress.info/nota.asp?num=019145

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Marzo 11, 2005 10:15 PM