Gerontologia - Universidad Maimónides

Julio 22, 2005

Diseñan un software que permite conocer la edad de las arterias

edad_arterias.JPGA través de la presión arterial e imágenes ecográficas de la carótida se evalúa cómo cumplen su función
* Fue utilizado entre pacientes hipertensos para conocer la acción de un fármaco
* Aseguran que podría aplicarse en personas sanas para diagnóstico precoz

La Nación
Viernes 22 de julio de 2005

Una investigación realizada entre 100 pacientes hipertensos por profesionales de la Fundación y la Universidad Favaloro probó la eficacia de un software diseñado por bioingenieros de esa institución para evaluar cómo actúa sobre la pared de grandes arterias enfermas de hipertensión un fármaco antihipertensivo de amplio uso en el mundo. Además, el método permitió medir el grado de enfermedad de cada individuo estudiado.
La investigación, publicada en el Journal of Hypertension de junio pasado, fue presentada durante el XXV Congreso Europeo de Hipertensión, realizado en Milán, Italia.
El doctor Ramiro Sánchez, jefe de la Sección Hipertensión Arterial de la Fundación Favaloro, indicó que el tratamiento de pacientes hipertensos no se limita a disminuir la presión, sino también a establecer qué ocurre en la intimidad de la pared arterial y a evaluar la acción de los recursos farmacológicos, "porque tenemos a disposición cinco grandes grupos de drogas, pero no todas actúan igual en cada paciente", dijo.
En esta ocasión, los profesionales de la Fundación Favaloro probaron la acción de los inhibidores de la enzima convertidora en angiotensina (IECA), droga muy utilizada en el mundo entero para tratar el problema.
"No vamos a ignorar la importancia de bajar la presión -dijo el doctor Ramiro Sánchez-, pero hay herramientas que además mejoran la condición general circulatoria y otras que no lo hacen. En este caso, confirmamos algo que ya se sabía: los IECA tienen un efecto benéfico sobre el tejido arterial, dentro mismo de la pared de la arteria. Pero lo que hemos descubierto gracias al diseño de nuestros bioingenieros es cómo consiguen ese efecto. Los IECA ayudan a disipar más eficientemente la energía que se produce al interior de las grandes arterias en los hipertensos, pero protegiendo la pared arterial. Lo que hacen es corregir la disipación de energía por penetración de la droga dentro de la pared de la arteria. Es decir, ayudan a disipar en forma más eficiente la energía protegiendo la pared y evitando la hipertrofia de las fibras musculares de la arteria."
El ingeniero Ricardo Armentano, doctor en biomecánica y decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Favaloro, añadió que la originalidad del método radica en medir de qué manera las arterias son capaces de disipar o transformar la energía.
Un terremoto en las arterias
"La hipertensión arterial es un terremoto para las paredes arteriales -dijo Armentano-. En un terremoto todo se viene abajo porque los materiales no son capaces de disipar la energía. Por eso, una teoría llamada damping prevé la ubicación de amortiguadores en casas o puentes, para disipar o transformar la energía del terremoto. Las grandes arterias del organismo (carótidas, femorales, aorta), y en especial las fibras del músculo liso de éstas, cumplen una función amortiguadora. Esta función consiste en transmitir en forma constante y pareja la onda pulsátil con la que «viaja» la sangre a través de los tejidos."
Según Armentano, la teoría del damping "nos hace pensar en que las fibras del músculo liso, al igual que estos amortiguadores, en la hipertensión arterial se transforman para disipar más energía, pero al hacerlo se engrosan, se hipertrofian".
Aun en personas normales, a partir de los 30 años esta presión pulsátil a la que son sometidas en forma permanente las paredes de las grandes arterias van generando un proceso de desgaste y fatiga.
"Pero si por alguna razón de la que no se conoce claramente su causa, la persona padece un fenómeno de hiperpulsatilidad -agrega el doctor Sánchez-, aumenta el gasto cardíaco y se va perdiendo la capacidad de amortiguación de esos movimientos continuos que acompañan a la onda de pulso. Entonces, las paredes de las arterias se enferman y se endurecen."
La importancia de la función
El doctor Sánchez agrega que si las arterias pierden su elasticidad y se transforman en algo parecido a un tubo rígido "esa arteria disipa muy mal la energía del gasto cardíaco, la onda de pulso viaja muy rápido, puede elevarse la presión y conducir a una disfunción ventricular y una progresiva insuficiencia coronaria".
La correcta "función" de las arterias no es un tema menor. La importancia de conservar paredes arteriales elásticas y amortiguadoras es tan importante, coinciden los especialistas, que aun cuando exista un ateroma (placa de grasa) que obstruya buena parte del calibre arterial, si las paredes son lo suficientemente flexibles podrán compensar mejor la obstrucción y permitir la conducción normal del flujo sanguíneo.
En tanto, Ramiro Sánchez dice que el método ha tenido una aplicación exitosa pero limitada a algunos pacientes de la Fundación y, por lo tanto, no está determinado su costo. Ricardo Armentano agrega que se trata de un recurso no invasivo y sencillo: se utiliza un manómetro y un tonómetro para medir la presión arterial y un ecógrafo de alta resolución que mide las pulsaciones de la arteria carótida.
"Hacemos una biopsia matemática de la pared arterial, en este caso de personas mayores -dijo Armentano-. Pero podría hacerse en gente más joven para determinar alteraciones precoces. Por ejemplo, que la pared arterial se engrose o cambien sus fibras o pierda su capacidad de amortiguación. Estas alteraciones no dan síntomas durante muchos años. Es un sistema muy sencillo, podría ser portátil, y aplicarse en grandes poblaciones para diagnosticar en forma anticipada distintas afecciones de las arterias."

Por Gabriela Navarra
De la Redacción de LA NACION
http://www.lanacion.com.ar/723416

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Julio 22, 2005 08:22 PM