Gerontologia - Universidad Maimónides

Agosto 13, 2005

Perder memoria no es algo normal de la vejez

Un deterioro de la memoria que no cumpla criterios de demencia puede alertar de la presencia de un deterioro cognitivo leve, un cuadro clínico con entidad propia que requiere seguimiento y control.

Fuente: DIARIOMEDICO.COM
http://www.diariomedico.com/edicion/noticia/0,2458,611495,00.html
Publicado por Mayores en Movimiento
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La pérdida de memoria nunca debe asumirse como una consecuencia normal del envejecimiento y debe ser consultada con el médico.
Así lo ha recalcado Pedro Gil, geriatra del Hospital Clínico San Carlos, de Madrid, durante la V Reunión de Demencias en Geriatría, organizada en Almería por el Grupo de Demencias de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG).
El experto ha insistido en la necesidad de sensibilizar a la población para que acuda al médico ante cualquier alteración de sus facultades cognitivas, pues el diagnóstico y seguimiento del deterioro cognitivo leve ayuda a evitar males mayores, como la evolución a demencia.

Precisamente el deterioro cognitivo leve ha sido el tema que ha centrado el encuentro de Almería. Este cuadro se sitúa a medio camino entre el envejecimiento normal y el anciano con demencia, pero tiene una entidad propia.
"Son personas que sufren una pérdida de memoria, pero que no cumplen los criterios de demencia", ha aclarado Humberto Kessel, geriatra del Hospital Torrecárdenas, de Almería.

Aparte de la pérdida de capacidad memorística, el deterioro cognitivo leve se caracteriza por la presencia de trastornos funcionales, psicológicos y conductuales, como el olvido de actividades instrumentales o avanzadas (manejo del teléfono, tareas laborales o lúdicas, habilidades sociales o deportivas, etc.).
Hipertensión, hiperlipemia, presencia del genotipo apoE4 y edad avanzada son otros de los síntomas que pueden conducir al diagnóstico de esta entidad.

Evolución a demencia
Dependiendo de los criterios empleados, la evolución a demencia es mayor o menor. Algunas series estiman que entre el 5 y el 10 por ciento de las personas con deterioro cognitivo leve progresan a demencia anualmente, "lo que supone que un 40-50 por ciento lo ha hecho a los cinco años.
Otros estudios más alarmistas elevan el porcentaje al 75 o incluso cien por cien".

Ante este baile de cifras, Gil ha insistido en la necesidad de precisar los criterios diagnósticos del deterioro cognitivo leve, "sobre todo para saber qué pacientes tienen riesgo de evolucionar a demencia y cuáles se estabilizarán o mejorarán".

El tratamiento es otra área que requiere precisarse. "De momento no disponemos de ninguna terapia aprobada, aunque hay ensayos en marcha con inhibidores de la acetilcolinesterasa, antioxidantes y antiinflamatorios", ha apuntado Gil.

Hoy por hoy los pacientes son sometidos a un estrecho seguimiento cada seis meses para que, en el caso de que evolucionen a demencia, el tratamiento se inicie lo antes posible. En cuanto a terapias psicológicas, como la estimulación cognitiva, "son útiles y aplicables, aunque es difícil cuantificar en qué grado".

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Agosto 13, 2005 09:11 AM