Un nuevo y sofisticado aparato de tamaño menor a una lapicera puede permitir asistir a un paciente infartado o que haya entrado en shock cardiogénico durante una angioplastía o padece de insuficiencia cardíaca para asegurar el flujo sanguineo normal mediante una diminuta turbina que permite bombear cinco litros de sangre por minuto para mantener estable los órganos de su organismo en estado infartado.
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Emil Domec
Actualizada: 10/10/2005
Exija a su corazón con actividad física en su rutina buscando siempre el latido adelante...!!, tal los consejos médicos que recomiendan desfíos deportivos como caminar activamente o entrenar corriendo todos los días para alcanzar subir escaleras o algún monte más escarpado que permita hacer trabajar su corazón, ya que es más difícil modificar los hábitos en la gente mayor para prevenir los eventos cardiovasculares.
Se supone que en poco tiempo de un futuro cercano los corazones artificiales no serán inalcanzables. Ésta es la opiñón del Dr. James Young, jefe de medicina de Cleveland Clinic Foundation de Ohio y Naples en Florida de EE.UU como el centro más experimentado y de avanzada tecnología cardiológica con diagnóstico por imágenes y que participó en el simposio organizado por el 32º congreso Argentino de Cardiología que se realizó del 7 al 10 de octubre en Buenos Aires.
En declaraciones a éste cronista explicó: "Los corazones artificiales son cada vez más pequeños, mas durables y se adaptan mejor fisiológicamente a los pacientes, dijo Young, y gracias a ello pacientes muy graves pueden salir del hospital e integrarse a la vida social normal. En los próximos cinco años tendremos dispositivos muy pequeños que no precisarán estar conectados por cables a sus fuentes de energía, de fácil colocación por ser de tamaño reducido para personas mas pequeñas, algo imposible actualmente con corazones artificiales comunes".
La nueva terapéutica está basada en un dispositivo de 6,4 mmm de diámetro, desarrollado de origen alemán llamado "Impella Recover" de un costo de U$S 4000 que permite la asistencia circulatoria en emergencia, a medio camino hacia un corazón artificial. Éste dispositivo se coloca mediante una cirujía cardíaca poco invasiva a través de la arteria femoral con una cánula para llegar al ventrículo izquierdo que no puede contraerse adecuadamente por tener sufrido un infarto al miocardio. Una vez alojada la pequeña turbina, toma la sangre del ventrículo y la hace circular a los distintos órganos a través de la arteria aórtica. Para casos de infarto masivo, ésta forma de asistencia circulatoria permite mantener al paciente estabilizado durante tres días y poder ir recuperando su función cardíaca que en muchos casos puede salvar su vida, ya que algunos ensayos con personas en alto riesgo permitió reducir un 70% el área afectada por el infarto.
Tambíén el Impella Recover puede servir como puente temporal de sustentación para mantener estable al paciente por no más de cinco dias hasta tomar una decisión de cuál será el próximo tratamiento a seguir.
Se trata de un dispositivo fácil de colocar, más económico que otras tecnologías y factible de ser usado en gran escala.
Se calcula para el próximo año ser usado en forma experimental en varios hospitales argentinos como explicó el Dr. Daniel Navia, jefe del Servicio de Cirujía Cardíaca del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).
Más info en : www.fund-cardiovascular.org.ar
o www.congreso-icba2005.com.ar , www.icba-cardiovascular.com.ar