Los expertos en nutrición del grupo AMMA GEROGESTIÓN explican como las personas de edad avanzada pueden tener una alimentación correcta y señalan como solucionar los pequeños conflictos que presenta una dieta especial para los ancianos en Navidad.
AMMA GEROGESTIÓN, grupo empresarial especializado en la promoción, diseño, asesoramiento y gestión de centros y servicios gerontológicos, señala los mejores consejos para una nutrición sana y qué hacer en la época de navidad. A medida que las personas envejecen deben prestar mayor atención a sus comidas, ya que el aporte energético adecuado disminuye con la edad debido a la falta de actividad física.
En este grupo, los problemas nutricionales y
la posibilidad de desnutrición resulta más grave que en otras etapas de la
vida. Los expertos señalan que uno de los principales trastornos
alimenticios en el anciano es la malnutrición por exceso, por defecto o por
estados carenciales de vitaminas y/o minerales.
Se debe considerar una ingesta sobre la 1.500 kcal. diarias que equivaldría
a los nutrientes necesarios. Deben tomarse alimentos ricos en fibra,
potenciar un consumo importante y variado de fruta y cereales integrales,
moderar la sal, y utilizar como condimento otras especies (ajo, cebolla,
clavo, tomillo, limón etc.) que además tienen efecto antioxidante. Los
alimentos bajos en grasa, lácteos con poca grasa, aceites vegetales son los
más aconsejados por los nutricionistas. Asimismo se aconseja una mayor
ingesta de pescado que de carnes; aves de corral y carnes magras, consumo
limitado de dulces y bajos en azucares refinados, uso moderado de alcohol y
evitar el tabaco. Es importante el aporte hídrico a intervalos regulares,
aunque no tengan sed (8 vasos de agua al día). Para finalizar, lo ideal es
ingerir 5 comidas al día.
Para una alimentación correcta, los expertos coinciden en que el
seguimiento de dietas restrictivas, pensando en la prevención de
enfermedades a largo plazo, puede producir carencias, por ello en las
personas mayores la prioridad es la alimentación que ingieren en el
presente. Aunque es indiscutible que debemos procurar mantener una dieta
equilibrada pero en épocas como la Navidad en donde existen mayores
posibilidades de desordenar los hábitos adquiridos durante el año, hay que
considerar la posibilidad de permitir pequeños excesos, preparando platos
apetecibles a la vista, nutritivamente completos y que se salgan de lo
cotidiano.
Para satisfacer la necesidad de los mayores hay que adaptar los menús a las
dietas especiales, y por sobre todo mentalizar a los mayores como a sus
familias de la importancia de seguir las dietas descritas, adaptando el menú
diario a las dietas especiales utilizando un poco la creatividad. Lo
importante es poder permitir al anciano algún “pecadito” que lo haga sentir
que también forma parte de la celebración comiendo igual de especial y
delicioso como el resto de la familia o compañeros de residencia, señalaron
los nutricionistas del centro.