La prevención es uno de los aspectos más olvidados en las personas mayores, en las que hay que intentar evitar que adquieran ciertas patologías. Una vez diagnosticadas, deben tratarse de forma rápida y eficaz, ya que la mayor parte de esos pacientes toleran el tratamiento de la misma forma que gente de menor edad.
DIARIO MEDICO (España)
El paciente geriátrico no es sinónimo de enfermo difícil ante el que estén de más algunas terapias. "El geriátrico tiene una connotación exagerada de patología crónica y de limitaciones funcionales, tanto desde el punto de vista físico como psíquico y social", ha indicado José Manuel Ribera Casado, catedrático de Geriatría de la Universidad Complutense de Madrid, que ha moderado una mesa redonda dentro del I Simposio Los mayores: desafío del siglo XXI, organizado por la Fundación Vianorte y el Centro de Cuidados Laguna y celebrado en Madrid.
En esta misma línea se ha situado José Masdeu, director del Area de Neurociencias de la Clínica Universitaria de Navarra, que ha señalado que el término mayor no tiene por qué signifcar discapacidad o incapacidad. "A una persona mayor cuando se le diagnostica una enfermedad, si se le trata mejora como si tuviera 20 o 30 años".
Con respecto a la génesis del Alzheimer, ha precisado que existen dos factores claves: la pérdida de células cerebrales y la afectación de la memoria. Entre los tratamientos disponibles, Masdeu ha recordado que sólo retrasan la evolución de la enfermedad y mejoran los síntomas, pero no la curan. A los fármacos disponibles, hay que añadir las vacunas, la inmunización pasiva con anticuerpos y otras aproximaciones.
Estudios en animales han mostrado que el ibuprofeno tiende a reducir la cantidad de amiloide en ratones. Y algunos trabajos epidemiológicos sostienen que los sujetos tratados con éste y otros antiinflamatorios similares son menos propensos a desarrollar Alzheimer.
El experto ha destacado la importancia de la asistencia domiciliaria de los pacientes con Alzheimer, "puesto que los enfermos están mejor en un ambiente familiar".
Manuel Gónzalez Barón, jefe del Servicio de Oncología del Hospital La Paz, de Madrid, se ha referido a distintos aspectos del cáncer en los ancianos. "Las neoplasias malignas continúan siendo una enfermedad de personas mayores. El 63 por ciento de los españoles que fallecen por cáncer tienen más de 65 años".
En la edad madura, el metabolismo es más lento, con lo cual la excreción de los carcinógenos es más lenta. Además, se produce una ralentización del sistema inmune y una mayor inestabilidad genética, que se traduce en una alteración de los genes tumorsupresores y en un acortamiento de los telómeros.
Aspectos pendientes
Los problemas que quedan por resolver en este colectivo son la ausencia de prevención, información y diagnóstico precoz, el retraso en el diagnóstico y el tratamiento inadecuado, "puesto que un porcentaje significativo de médicos creen que no toleran bien los tratamientos, situación totalmente errónea".
Gónzalez Barón ha subrayado que es necesario ayudar al paciente oncológico mayor a sentirse útil y a que mantenga su dignidad.
Alfonso Cruz, presidente de la Sociedad Europea de Geriatría y jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Ramón y Cajal, de Madrid, ha recordado que el envejecimiento es un proceso que se da en todas las especies, "pero la edad no es una enfermedad, ni envejecer es lo mismo que enfermar".
Un quinto de los adultos tiene restringida su actividad, cifra que aumenta hasta un tercio en los mayores de 70 años. Por eso, es necesario minimizar la incapacidad y la minusvalía, sobre todo en estos sujetos.
En esta situación, los esfuerzos se deben centrar en la prevención de las enfermedades y en la asistencia y el tratamiento adecuado, sin olvidar la importancia que tiene la rehabilitación.
Por último, Cruz ha indicado que la valoración geriátrica exhaustiva se apoya en buscar datos clínicos diferentes, que hagan referencia a la nutrición, a la función física y mental, y a los aspectos sociales.
Planes futuros
El Centro de Cuidados Laguna funciona en su sede provisional en el distrito madrileño de Latina, pero estará en pleno rendimiento en otoño de 2005 (ver DM del 19-IX-2002). "Se trata de una iniciativa que complementará las prestaciones ofrecidas por otros servicios sociales de carácter público e instituciones socio-sanitarias de distinta índole", según ha explicado el catedrático Fernando Reinoso, presidente de la Fundación Vianorte.
Coincidiendo con la inauguración del edificio, está previsto que se abra el Centro de Día, otra zona para la formación de profesionales y otra para el fomento y la coordinación del voluntariado. De esta forma, Laguna complementará las prestaciones ofrecidas en la actualidad. También se dispondrá de una unidad de ingreso de cuidados paliativos con 20 camas y servicios para estancias cortas de los pacientes que lo necesiten.