Jubilados y sindicalistas se enfrentaron con agentes antidisturbios cerca del Kremlin, ayer, tras la reforma
Trece años después de la caída de la URSS
La Duma eliminó la asistencia a millones de pobres y jubilados
* La nueva legislación termina con privilegios para pensionados, madres solteras y veteranos de guerra
* El gobierno reemplazará las ventajas con subsidios directos en efectivo
La Nación
Sábado 3 de Julio de 2004
En medio de debates, protestas callejeras y disturbios, la Duma rusa logró ayer la primera aprobación de una ley que elimina todos los beneficios sociales heredados de la época soviética, trece años después del desmembramiento del bloque comunista.
La minúscula oposición comunista y nacionalista de la Duma (la Cámara baja del Parlamento ruso) no pudo impedir que el partido del Kremlin, Rusia Unida, aprobara la ley que sustituye por subsidios en metálico el sistema de garantías y beneficios sociales para los sectores más desposeídos.
Más de 2000 jubilados y militantes sindicales se congregaron entre la sede parlamentaria y el Kremlin para manifestarse contra esa iniciativa del gobierno que, en su opinión, "condena a la extinción" a los más débiles y pobres. Las autoridades movilizaron a unidades antidisturbios para dispersar a golpes a los ancianos y mujeres descontentos, y el servicio de seguridad selló las puertas de la Duma a cal y canto.
Alexander Kuvayev, diputado y dirigente comunista, instó a los manifestantes a "aunar esfuerzos y empezar una huelga política indefinida" contra la iniciativa del gobierno.
La ley elimina una larga serie de privilegios para los jubilados, como el transporte público gratuito, los descuentos en el pago de los servicios comunales y la atención médica, entre otros. La nueva norma también afecta a las madres solteras, las familias numerosas, los veteranos de guerra y los jóvenes sin medios para pagar sus estudios. A cambio, el gobierno otorgará subsidios directos en efectivo que, en opinión de los adversarios del proyecto, quedarán desvalorizados por la inflación; su pago ya no estará a cargo del centro federal sino de los exiguos presupuestos locales.
Los partidarios de la ley arguyen que el sistema actual de ayudas sociales, arrastrado desde la era soviética, es injusto, fomenta la corrupción y favorece únicamente a los habitantes urbanos, pues la población rural prefiere recibir dinero contante y sonante al privilegio, por ejemplo, del transporte público gratuito.
"El gobierno debe tener la honradez de anunciar sin rodeos a todo el país que hoy [por ayer], 2 de julio, Rusia se despide definitivamente del socialismo y del sistema soviético de seguridad social", sentenció el ultranacionalista Vladimir Shirinovski.
Según los sindicatos, un tercio de los 145 millones de rusos vive en la pobreza, cuya erradicación ha prometido como una de sus prioridades el presidente ruso, Vladimir Putin. Esa situación es aún peor para unos 31,2 millones de habitantes cuyos ingresos no alcanzan el mínimo de supervivencia, estimado en 2143 rublos mensuales (74 dólares). Según una encuesta, 58% de los rusos se opone a la ley y un 25% está a favor de una supresión parcial de las ventajas sociales.
http://www.lanacion.com.ar/04/07/03/dx_615186.asp