El 90% de los altos ejecutivos tiene problemas de salud
Padecen exceso de colesterol, encefalopatías y depresión motivadas por factores de riesgo como el estrés y la ansiedad. La mayoría de las empresas carece de planes preventivos
Infobaeprofesional.com
El exceso de colesterol, la encefalopatía vascular, el déficit metabólico y la depresión son los problemas de salud más comunes entre los directivos de empresas, uno de los grupos profesionales considerados de más alto riesgo.
Los datos se desprenden de un estudio sobre el estado de salud de los altos ejecutivos presentado por el presidente del Centro de Investigación Biomédica EuroEspes de España, Ramón Cacabelos.
Enfermedades silenciosas
El informe, que se basa en los análisis realizados a 192 directivos españoles (126 hombres y 66 mujeres), indica que "sólo un 7% de los directivos empresariales goza de un buen estado de salud".
Además, uno de cada cinco directivos presenta inconvenientes de salud que pueden derivar en enfermedades graves a futuro.
Según la investigación de EuroEspes, el 22% de los ejecutivos padece problemas de tipo cerebrovascular, como mareos, vértigo o dolores de cabeza, el 15% tiene cefaleas y más del 17% padece trastornos depresivos.
En ocasiones, el paciente también puede verse afectado por las llamadas "patologías silenciosas", enfermedades que en principio carecen de síntomas pero que a partir de los 60 años pueden provocar daños irreversibles, como la aparición de un accidentes cerebrovascular o un ictus.
Factores de riesgo
La carga de responsabilidad, el estrés o la ansiedad son algunos de los factores desencadenantes de los problemas de salud que padecen los altos directivos.
En este sentido, casi la mitad de los directivos presenta índices de colesterol superiores a los considerados saludables, un 15% supera la tasa normal de glucosa y un 7% tiene carencia de ácido fólico.
Las pruebas realizadas revelaron también que una cuarta parte de los directivos mostró resultados anormales en los electrocardiogramas y un 15% en los escáner cerebral.
El presidente de EuroEspes destacó que "no existen diferencias significativas, entre hombres y mujeres, salvo las inherentes a la diferencias biológicas de ambos sexos".
A pesar de esto, las mujeres tiene más recursos para hacer frente a situaciones de estrés, sobre todo las que lo compaginan con la maternidad.
Una estrategia preventiva
Los médicos que llevaron adelante la investigación estimaron que la implantación de planes preventivos de parte de las empresas podría reducir entre un 40 y un 50% los costos directos e indirectos de este segmento en las compañías.
En concreto, las referencias aluden a los costos relativos al tratamiento, diagnostico de enfermedades, carga psicológica y horas perdidas en detectar la patología.
Cacabelos manifestó que "si se consiguiera retrasar un año la aparición de una enfermedad, se reduciría hasta un 30% la prevalencia de esa patología".
Las pruebas realizadas, también indicaron que un alto porcentaje de los directivos muestra daños en el hígado relacionados con la ingesta de alcohol y con una mala nutrición.
Sin cobertura
Respecto a los planes de prevención de enfermedades, sólo en un 45% las empresas realizan chequeos rutinarios y un 60% responde a la propia iniciativa del empresario.
Las enfermedades del sistema nervioso que afectan al personal cualificado de la empresa reducen la productividad de la compañía, manifestada en pérdidas económicas.
Además, la situación laboral del directivo cambia sustancialmente, ya que se produce una pérdida de liderazgo y de competitividad en el trabajo.
En el ámbito personal, el paciente puede sufrir un deterioro de su vida social y familiar que puede llegar a convertirse y según el grado de su enfermedad, en discapacidad física o psíquica.
Pioneros en prevención
En la actualidad, Estados Unidos y Japón implementan ya amplios planes de medicina preventiva, teniendo éste último una cobertura médica del cien por cien.
Cacabelos subrayó que "en Canadá los problemas de hipertensión arterial se han reducido de un 20 a un 5% en los últimos 15 años gracias al establecimiento de los mecanismos de prevención".
Cómo se realizó el estudio
La investigación se llevó a cabo en el Centro de Investigación Biomédica EuroEspes en Bergondo (La Coruña) y se enmarca dentro del Programa de Prevención de Riesgo Cerebral que implantó la compañía en 2005.
Este programa apunta a ayudar a las empresas a “cuidar” el cerebro de sus directivos, que es su herramienta de trabajo principal y también la más vulnerable por las continuas situaciones de desgaste y estrés a las que estos profesionales están sometidos.