Los resultados de los estudios más extensos sobre la depresión y la esquizofrenia serán revelados en los próximos meses y podrían potencialmente transformar el trato de los pacientes y revolucionar algunos de los mercados más lucrativos de la industria de la medicina.
Por Leila Abboud
The Wall Street Journal
Julio 28, 2005
Los estudios, financiados por el gobierno estadounidense, son parte de una iniciativa de la división de salud mental de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH) para obtener información científica confiable sobre las diferencias entre drogas y estrategias de tratamientos para enfermedades psiquiátricas. El plan incluye cuatro pruebas en depresión crítica, maniacodepresión, esquizofrenia y depresión en adolescentes. La meta es cubrir un vació de información que ha plagado la psiquiatría en desmedro de la calidad del cuidado a los pacientes.
Los estudios, que costaron US$140 millones, comparan tratamientos para descubrir los impactos positivos y negativos de las drogas. Las pruebas, con miles de participantes, se han realizado en todo el país, en clínicas comunitarias y consultorios médicos, además de centros académicos.
La investigación examina la efectividad del costo de varios tratamientos y compara drogas antiguas con nuevas para intentar responder una de las preguntas más constantes que enfrentan los médicos. "¿De todas las drogas que tengo que escoger, cuál debo usar para el paciente que tengo frente a mí?", dice Grayson Norquist, un ex psiquiatra de los NIH, quien tuvo un papel fundamental en las pruebas.
Mucho dinero estará en juego si las pruebas revelan diferencias entre la seguridad y la eficacia de varios medicamentos. Los antidepresivos y antipsicóticos son la tercera y cuarta droga en importancia en EE.UU., después de las medicinas para el colesterol y la acidez, cuyas ventas el año pasado alcanzaron los US$20.700 millones en el país. Tanto los que pagan por los cuidados de la salud como los inversionistas están esperando los resultados de las pruebas.
Algunas conclusiones preliminares reveladas en agosto de 2004, mostraron que la combinación de antidepresivos y terapia es el tratamiento más efectivo para depresión en adolescentes.
Las pruebas están tratando de resolver qué hacer con muchos pacientes que no mejoran con la primera droga que se les prescribe.
"Los médicos están probando con base a sus experiencias con pacientes", dijo Jeffrey Lieberman, investigador principal sobre el estudio de la esquizofrenia, conocido como CATIE. El problema es más agudo cuando se trata de la depresión. Casi la mitad de los pacientes no responden a terapias estándares con antidepresivos.
Los investigadores de CATIE preparan su informe para publicarlo en septiembre, pero ya saben que cerca del 70% de los pacientes en el estudio no respondió positivamente a la primera droga y se les cambió a otra.