Gerontologia - Universidad Maimónides

Agosto 03, 2005

La dieta de los mayores en España es más equilibrada que la del resto de la población

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales presentó el Informe 2004: Las personas mayores en España, que muestra abundates datos sobre la salud

Jano On-line y agencias
14/07/2005

La dieta de los mayores en España parece más equilibrada que la del resto de la población, aunque el peso corporal no se corresponde con la ingesta de alimentos, debido, sobre todo, a los hábitos nutricionales inapropiados adquiridos en edades previas, según datos del Informe 2004. Las personas mayores en España, presentado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

Un 86% de los mayores consume fruta fresca a diario y sólo lo hace el 59,3% de los que tienen de 16 a 44 años, mientras que la carne es consumida a diario por el 14,4% de las personas de edad avanzada, pero la consumen el 22,8% de los jóvenes y adultos. Los mayores también ingieren más verdura y hortalizas y mucho menos embutidos y fiambres.

Pero el peligro, según indica el informe, existe en edades previas, pues la cronicidad de enfermedades motivadas por dietas insanas se arrastra hasta la vejez, aunque en ésta se modifiquen algunos hábitos. Aún así, más de tres cuartas partes de la población de 65 a 79 años tiene sobrepeso.

En lo que respecta al tabaco, entre la población mayor, los hombres fuman en mucha mayor proporción que las mujeres y, además, han dejado de hacerlo en proporciones muy altas debido a normas y costumbres sociales -el 95% de las mujeres de edad avanzada nunca fumaron-.

Otra cuestión diferente es el consumo de alcohol, puesto que uno de cada cuatro mayores bebe vino diariamente, los varones en proporciones que triplican o cuadriplican a las mujeres (40,2% frente a 18,6%).

El 19% de todos los accidentes los padecen las personas de edad destacando los, domésticos y de tráfico, según explica el informe. Las caídas en el hogar son las más frecuentes y se incrementan con la edad y aunque decrece la siniestralidad por accidente de tráfico, cambia el patrón de conductor y pasajero a peatón como víctima de atropello, especialmente en las zonas urbanas -el 45,2% de todos los ciudadanos atropellados en zona urbana son mayores-.

Apenas el 40% de la población mayor manifiesta tener un estado de salud bueno o muy bueno, aunque con una ligera tendencia creciente. Uno de cada cuatro mayores lo declara malo o muy malo. Esto se corresponde con el dato de que casi uno de cada dos personas mayores declaró haber padecido alguna enfermedad en el último año que le ha limitado su actividad habitual.

El tipo de dolencia predominante declarada por los mayores es osteomuscular, especialmente por las mujeres, ya que los hombres citan más problemas del corazón y aparato respiratorio. Mientras, los médicos diagnosticaron a los mayores principalmente hipertensión arterial (37,7%), seguida del colesterol elevado y enfermedades del corazón. Además, una de cada diez personas de edad tiene diagnosticada una depresión, siendo las mujeres las más afectadas aunque la muerte por suicidio o lesiones autoinflingidas -que se incrementa con la edad- es mayor en varones.

En cuanto a las enfermedades más frecuentes, el 23% de las personas de a partir de 65 años atendidas en un hospital, presentaban enfermedades circulatorias -primera causa de muerte-; un 12,5%, por causas digestivas; un 12,4%, respiratorias y un 11%, para el tratamiento de cáncer.

El cáncer, segunda causa de muerte y quinta de hospitalización, está más distribuido entre todos los grupos de edad pero la tasa de mortalidad entre adultos de 45-54 años y a partir de 85, sólo se ha multiplicado por dos, cuando la media lo hace casi por cuatro.

Entre las personas de edad, indica el informe, ocupan el primer lugar en orden de mortalidad los varones viudos, seguidos de los varones solteros, las mujeres viudas y solteras, los varones casados, separados y las mujeres casadas y separadas.

En las recetas médicas las cifras crecen significativamente a partir de los 50 años, pero sobre todo existe un crecimiento notable entre las mujeres de edad. De este modo, la mayor parte de la factura farmacéutica pública es consumida por los pensionistas -77,4% de todo el gasto que supone 1,1 billones de pesetas-.

Además, un 37,8% de las personas mayores de 65 años ha consultado con algún médico en las dos últimas semanas. Sin embargo, destacan las escasas visitas al dentista y al ginecólogo. Las tasas de utilización hospitalaria también se incrementan a partir de esta edad.

Publicado por Licenciatura en Gerontología el día: Agosto 3, 2005 06:07 PM