Gerontología - Universidad MaimónidesGerontología - Universidad Maimónides
Febrero 25, 2004
Cuando 95 años no son tantos

Francisco Rizzuto, periodista récord

¿Se puede, en nada más que 95 años, estar entre los fundadores de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa), de la Academia Nacional de Periodismo, del Consejo Publicitario Argentino, de la Asociación Argentina de Editores de Revistas y de la Asociación Argentina de Profesionales en Relaciones Públicas? ¿Ser, además, campeón nacional de espada, actuar en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) por 25 años, ser socio activo de una veintena de entidades nacionales e internacionales, dar 1500 conferencias, escribir ocho libros y tener publicados artículos en todos los idiomas? ¿Queda tiempo para integrar la comisión Pro-Monumento al General San Martín, en Bruselas, presidir la Cámara de Comercio Argentino-Hondureña, y ser el único argentino no diplomático con ocho condecoraciones internacionales recibidas en sedes gubernamentales, como Caballero Gran Cruz de la Soberana Orden Militar de Malta? ¿Y para leer tres diarios por día, y que hasta el Papa lo salude a uno para el cumpleaños?

Publicado originalmente en La Nación 18/02/2004

Todo, mientras se lleva adelante, por 55 años, una agencia de informes comerciales y una revista mensual de temática socieconómica internacional. Y... sin más formación académica que el colegio primario. "Es mucho, pero se puede", se ríe Francisco Rizzuto.

Es que él cuenta con la ventaja de haber empezado a los 13 años: "En 1921 terminé sexto grado y mi padre, Francisco Rizzuto, me nombró secretario de Veritas, la agencia y la revista de las que él era fundador, director y dueño. Al principio, yo me encargaba de cosas más o menos simples. Después, llegué a director", cuenta, a un mes de su último cumpleaños, en su casa en Retiro, donde guarda alrededor de 60 distinciones y hasta fotos autografiadas de Paulo VI ("Soy el único periodista que lo entrevistó; los papas no dan entrevistas"), Juan Pablo II (que lo recibió en la Capilla Sixtina) y Teresa de Calcuta. "Todo eso indica que me porté bien", se ufana un poco en broma, un poco en serio.

.Decálogos para todos

Pero si se trata de portarse bien, para Rizzuto no hay nada como sus decálogos: escritos hace unas tres décadas y distribuidos gratuitamente por la Liga Pro Comportamiento Humano (todavía pueden hojearse en Alsina 2525 3º A, 4566-3928). Son 28, e incluyen consejos para el comportamiento humano (Respetar las ideas ajenas y defender las propias); el niño; el transportista (Tratar con fineza y servir las leyes de la cortesía); el deportista; las fuerzas del orden (Tener presente en el trato con el subordinado, que la misión del jefe es principalmente didáctica y nada enseña mejor que el propio ejemplo); el ejecutivo (Infórmate antes de ordenar y ordena como si tuvieses que rogar) y para veintidós circunstancias más.

Las normas que le conciernen, dice que las aplica en su vida. Agitadísima y con muchos viajes ("Mi padre me daba los medios para viajar, y yo viajaba"). Tanta actividad, claro, hizo que no se casara hasta los 54 años: con Marta Pampín -30 años menor-, tuvieron tres hijos, y en 1985 renunció a todos sus cargos. Su trabajo ahora consiste en una columna semanal (Aquí Argentina, se llama) con información de todo tipo, "menos política", que una agencia neoyorquina distribuye en medios de Estados Unidos.

-¿Sigue caminando 60 cuadras todos los días?

-Nooo... Hoy caminé 80.

Silvana Moreno

http://www.lanacion.com.ar/04/02/18/ds_574012.asp

Enviado por Licenciatura en Gerontología el: Febrero 25, 2004 02:43 PM