El Centro Hirsch, hogar para adultos mayores y rehabilitación, es el primer instituto argentino en aplicar un sistema de alertas móviles al cuidado de sus residentes, que permite detectar la ubicación del paciente en el lugar en que éste se encuentre. Así se convierte –luego de 75 años de experiencia en la atención y cuidado de excelencia - en el pionero del uso de tecnologías informáticas al servicio de adultos mayores.
“Se trata de un pulsador que se coloca en una pulsera o collar del residente y funciona a través de radiofrecuencias. Es un nuevo sistema de comunicación entre el personal y los ancianos que necesitan solicitar atención adonde quiera que estén”, explica el médico director de la institución, especialista en Geriatría y Medicina Familiar, Moisés Schapira. “Los sistemas de llamado tradicionales de las instituciones, con timbres fijos, resultan obsoletos para los tiempos que corren”, señala el Gerente General de Hirsch, Iván Spoliansky.
Ubicado en la localidad de San Miguel, provincia de Buenos Aires, el centro de excelencia Hirsch ocupa un predio de cuatro hectáreas, donde conviven más de 200 ancianos, que reciben la mejor calidad de vida posible, preservando y estimulando sus capacidades para ser autónomos, y brindando el mejor cuidado y atención permanente –en lo humano y en lo médico– a quienes lo necesitan.
Cuando la central del sistema capta la señal de alarma, sabrá quién lo pide, qué necesita y a quién enviar, lo cual permite dirigir mejor los recursos humanos del lugar para la atención más rápida y eficiente.