Tai Chi: efectiva terapia para la prevención de las caídas
La práctica habitual de esta técnica oriental de ejercicios aumenta la flexibilidad y la velocidad en el movimiento.
En España el tai chi es una práctica reciente pero con una gran acogida, que mejora la forma física y potencia la confianza del anciano con trastornos psicomotores, resultando claramente demostrado el poder preventivo en las caídas accidentales de pacientes geriátricos.
· J. Manzarbeitia - 29/01/2006
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Los traumatismos producidos por caídas banales constituyen uno de los principales motivos de asistencia médica en el campo de la Geriatría. Las causas que provocan las caídas en los ancianos son multifactoriales influyendo factores físicos, psíquicos y funcionales globales.
Numerosos programas se han puesto en marcha para disminuir la frecuencia de las caídas en este grupo de edad y así reducir la morbilidad y complicaciones asociadas. Los estudios demuestran que largas temporadas de inactividad física producen una pérdida de masa ósea, aumentando el riesgo de osteoporosis y fracturas. De hecho, las guías dietéticas americanas recomiendan que, a partir de los dos años se debe participar en la práctica de una actividad física moderada durante 30 minutos diarios, todos los días.
Las principales sociedades geriátricas y traumatológicas del mundo recomiendan la práctica rutinaria de ejercicio físico como uno de los pilares fundamentales para mantener la capacidad funcional y psicomotriz con el fin de evitar las caídas, entre otros. El tai chi, —originalmente desarrollado como forma de artes marciales— ha sido empleado durante siglos como guía de ejercicio físico para la tercera edad. Los beneficios observados son numerosos, pues mejora la función cardiorrespiratoria y el bienestar psíquico.
Ejercicio suave
Recientemente, se ha publicado un trabajo que evalúa las ventajas del tai chi en la prevención de las caídas en población anciana. Su práctica habitual mediante ejercicios de bajo impacto, aumenta la flexibilidad y velocidad en el movimiento. La duración semanal del ejercicio no está clara, pues algunos autores estiman que debe ser individualizado en función de las características individuales y las enfermedades asociadas de cada paciente.
Los resultados del trabajo concluyen que la práctica de tai chi durante 4 sesiones semanales, mejora la forma física, reduce el riesgo de caídas y mejora la habilidad del anciano para mantener la estabilidad ante cualquier barrera arquitectónica. Sin embargo, el estudio no ha conseguido demostrar que aumente la velocidad de la marcha.