Al no tener síntomas que alerten al paciente, no se consulta al médico
La disminución de la densidad mineral ósea (DMO) no presenta síntomas específicos que alarmen al paciente como para llevarlo a realizar una consulta médica. Sólo una historia clínica completa -con un interrogatorio dirigido a buscar factores de riesgo que influyan sobre la masa ósea-, permite seleccionar a la población que merece ser estudiada para descartar osteopenia y/o osteoporosis. Cuando se habla de prevención de osteoporosis se hace referencia a una población de mediana edad y compuesta en su mayoría por mujeres, aunque los hombres mayores de 70 años también están involucrados.
La Gaceta - Tucumán 5/03/2006
Cómo hacer la evaluación
En la evaluación para descartar osteoporosis hay que considerar ciertos factores de riesgo, y los más importantes son: sexo, edad y raza. La incidencia de fracturas osteoporóticas es mayor en las mujeres postmenopáusicas de raza blanca.De todas formas no se descarta que mujeres y hombres de otras edades y razas se vean afectados por la enfermedad.
• Deficiencia de estrógenos: cuando el cese de la secreción estrogénica (menopausia) se produce en forma precoz (antes de los 40 años), y más aún cuando es abrupta, lleva aparejada una pérdida importante de masa ósea. En estas circunstancias está indicado un tratamiento preventivo con terapia hormonal de reemplazo hasta la edad fisiológica de la menopausia, para prevenir osteoporosis.
• Adelgazamiento extremo: se considera que cuando el índice de masa corporal (IMC) es inferior o igual a 20, el sujeto es delgado y tiene un factor de riesgo para desarrollar osteoporosis. El interrogatorio médico debe abarcar los antecedentes de trastornos de la conducta alimentaria, ya que los pacientes con estas enfermedades no sólo presentan delgadez extrema sino que también suelen tener hipoestrogenismo u otros trastornos hormonales, y disminución de la absorción de nutrientes que pueden afectar al hueso.
Fracturas por traumas leves
Ciertas fracturas, como la de cadera, que presenta mayor morbimortalidad, se producen en edad avanzada. En la Argentina, el promedio de edad de los pacientes que las sufren es de 80 años en ambos sexos. Pero las personas con antecedente de fracturas por traumas leves (osteoporóticas) tienen mayor riesgo de sufrir nuevas fracturas osteoporóticas. Son pacientes enfermos, pero sin diagnóstico. La reducción de tres o más centímetros en la talla del sujeto o el aumento de la cifosis dorsal pueden orientar al médico hacia la presencia de aplastamientos vertebrales.